"Amazing Stories", fundada en 1926 y dirigida por Hugo Gernsback, fue la primera revista dedicada exclusivamente a la ciencia ficción, y se nutrió inicialmente con historias de Julio Verne, H.G. Wells y Edgar Allan Poe.






Fauna Secreta
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Fontcuberta, de nombre Joan, es un fotógrafo catalán. Aunque quizás sería más correcto llamarlo antifotógrafo puesto que consigue con sus imágenes hacernos dudar de que dicha fotografía siquiera exista, y si a una fotografia le quitamos la imagen nos queda nada.
Es bien conocido todo lo bien conocido que puede llegar a ser un fotografo que no retrata actores de Hollywood y ademas sigue vivo. A finales de los años 80 realizó junto con Pere Formiguera una exposicion itinerante que recorrío España y parte del extranjero y que le supuso su lanzamiento a la fama mundial. La exposición rescataba el trabajo de campo de un desconocido profesor alemán, Peter Ameinsenhaufen. Este profesor, biólogo, naturalista, botánico, antropólogo, habia recorrido el mundo descubriendo nuevas especies de flora/fauna desconocidas hasta la fecha para la ciencia. Sus constantes enfrentamientos con las elitistas sociedades de historia natural de toda Europa lo habían relegado al olvido del sotano de su casa, donde dormian todos sus fantasticos descubrimientos, que eran ahora rescatados por Fontcuberta y Formiguera para darlos a conocer al mundo entero, la exposicion se llamó FAUNA SECRETA.
Con la ayuda de otros especialistas rescataron del olvido al desconocido Cercopithecus icarocornu, un mono alado cornudo ó la Solenoglypha polipodia especie de serpiente con 6 pares de patas.

“Las sesiones de toma de imagenes tambien fueron muy productivas en lo que a anecdotas se refiere. En una ocasion, nos encontrabamos en la Roca del Vallés, en un campo lindante a la casa de Joan Fontcuberta. Fotografiabamos al Alopex stultus y lo teniamos colocado en su postura caracteristica, es decir: con la cabeza bajo el suelo. La incidencia de la luz no era la ideal y decidimos esperar un rato para que las sombras tomasen otra inclinacion. Abandonamos al Alopex y fuimos a tomar un café a casa de Joan. Por lo que pudimos deducir mas tarde, durante este espacio de tiempo un labrador que pasó por el campo vio el extraño animal y corrió al pueblo para dar la alarma. Cuando volvió, acompañado por algunos amigos armados con grandes palos, Joan y yo habiamos terminado la fotografía y nos habiamos llevado el ejemplar a casa. Aquel pobre hombre intentó en vano convencer a sus amigos de la existencia de un animal monstruoso que se encontraba allí una hora antes. Al parecer, ya era conocido en el pueblo por su gran imaginacion y su tendencia a abusar de las bebidas alcoholicas. A partir de aquel momento, su fama creció considerablemente.”